Easenergía apuesta por la utilización de energía que proviene de fuentes como el sol, el calor geotérmico, o la lluvia, es decir, se rellenan de continuo y no se agotan.
Estas energías alternativas pueden emplearse para obtener electricidad, combustible para motores, energía en zonas rurales o aisladas o para calefacción.
Esto significa que la disponibilidad es infinita, nunca se agotarán. Otras fuentes tradicionales de energía, como el carbón, el petróleo y el gas son limitados y cada día que pasan las reservas mundiales se agotan irremediablemente. Las energías renovables contribuirían y contribuyen a reducir nuestra dependencia sobre los combustibles fósiles, y con ello, de la dependencia del abastecimiento desde terceros países. La energía del sol, la energía eólica (en tierra y mar), el agua en movimiento, etc, puede proveer de gran cantidad de energía.
Las energías alternativas son limpias y no conllevan apenas la emisión de gases de efecto invernadero. No se agotan recursos naturales y tienen mínimos impactos sobre el medio ambiente, sin productos de desecho, emisiones de CO2 y otros tóxicos, como ocurre con las fuentes tradicionales de energía. Los beneficios medioambientales de las energías renovables son muchos, y sobretodo contribuirán a mejorar los niveles de contaminación atmosférica. Con un aire más limpio, la población humana ganará seguro en salud.
Nuestra dependencia de los combustibles fósiles se ha ido incrementando de forma exponencial en los últimos años. Nuestro país depende de políticas de los países productores de petróleo y gas, y no son raros los conflictos, guerras y subida de precios por disputas por esos recursos naturales. Si mejorásemos la implantación de centrales productoras de energías limpias, tendríamos una producción segura de energía sin depender de factores externos
La energía renovable cada vez es más competitiva frente a otras fuentes de energía convencionales. Además, se crean miles de puestos de trabajo tanto en fabricación, como en instalación, mantenimiento y comercialización, que contribuyen en gran manera a la economía del país.
Como gran parte de la energía producida proviene de fuentes no renovables que continuan su escalada de precios, el coste final de la energía para el consumidor experimenta subidas periódicas. Con una producción estable y asentada basada en energías renovables, el precio no sufriría tantos altibajos.